La gripe es una infección vírica (influenza) que afecta a la población general. Aunque puede padecerse durante todo el año, la incidencia aumenta en otoño e invierno. Es por ello que en estas fechas se conciencia sobre la importancia de la prevención de la enfermedad; ya que anticiparse a ella es vital en determinados grupos poblacionales. Esto es así para:
- Adultos mayores de 65 años
- Niños mayores de 6 meses
- Embarazadas
- Personal sanitario
La campaña de vacunación ha comenzado el 22 de octubre en toda España. Este año en Andalucía serán 1.350.000 dosis, un 10 por ciento más que en 2017.
Gripe: alimentos para fortalecer el sistema inmunitario
El Dr. Joseantonio Trujillo, médico hospitalista en IQA y experto en nutrición, incide que «aunque la medida más efectiva es la vacunación, también a través de la alimentación podemos ayudar a nuestro organismo». De esta manera recomienda alimentos que fortalecen y previenen enfermedades víricas como la gripe.
- Ajo: Gracias a su alto contenido en zinc, el ajo refuerza el sistema inmunitario. Además, sube los niveles de interferón, una proteína que activa los niveles de defensa ante la presencia de infecciones virales.
- Yogur: El lactobacilus de los yogures ayuda al organismo a hacer frente a los virus.
- Tomillo: Se puede tomar también en infusión y protege el organismo ante agentes externos como el virus influenza.
Gripe: síntomas
No en raras ocasiones hay quien la confunde con un resfriado. Sin embargo, el virus influenza (que provoca gripe) presenta estos síntomas:
- Fiebre
- Dolor de músculos y articulaciones (mialgia)
- Malestar general
- Cansancio
- Dolor de cabeza
- Tos
Por contra, el Dr. Joseantonio Trujillo apunta que el resfriado provoca febrícula (temperatura inferior a 37,5ºC); si presenta dolor este es localizado, y rinorrea (moqueo líquido). En este artículo, escrito por Laura Reyes Carrillo, enfermera y editora de El Blog de las Cuidadoras; se diferencia ambas patologías.
En cualquier caso, el Dr. Joseantonio Trujillo recomienda que «hagamos uso de la dieta mediterránea con productos frescos y de temporada». Y es que con ello se consigue mantener unos hábitos alimenticios saludables que se refleja en la salud propia.